31 de marzo de 2009

FAMILIA

En tren de experimentar, acá hay un video que hice de mi pequeña gran familia, en julio del año pasado, cuando Pedrito ni siquiera gateaba.

25 de marzo de 2009

FELIZ CUMPLEAÑOS, CHOCHOLETA

Cinco años han corrido ya desde aquella tardecita en que nací como papá, y sigo aprendiendo cosas día a día.

Serenamente renuncio a describir ese instante en que me entregaron a nuestra hija y al oír mi voz dejó de llorar.

Feliz cumpleaños, Sofía Isabel.

21 de marzo de 2009

IRLANDA DE CABEZA AL GRAND SLAM

Hoy es un día histórico para el rugby irlandés, porque la Selección de la verde Erin le ganó a Gales en Cardiff 17 a 15 y conquistó el Seis Naciones -que no ganaba desde 1985- además de hacerse acreedor al honorífico Grand Slam por haberles ganado a todos los equipos que disputaban la competencia, esto es, Inglaterra, Italia, Francia, Escocia y Gales. La única vez que Irlanda había conquistado el Grand Slam había sido en 1948.

El partido con los galeses fue muy trabado en el primer tiempo, en que Gales se fue a los vestuarios con ventaja merced a dos penales. En la segunda mitad los irlandeses salieron con todo y rápidamente sumaron con dos tries convertidos (el segundo puede verse en la imagen que acompaña estas líneas). Gales fue descontando a través de penales -uno de ellos, cobrado por el árbitro por falta de caballerosidad de O'Callahan, que se burló de un rival- y llegó a ponerse en ventaja con un drop. A muy poco del final, O'Gara ejecutó brillantemente un drop y puso el resultado final, aunque la última jugada del match fue un penal galés pateado desde 48 metros, que no llegó a los palos y permitió el festejo de toda Irlanda.

Las calles de Dublin, como el martes pasado en St. Patrick's, ya estarán rebosando de abrazos, canciones y festejos, como en los pubs, en los clubes y en las casas.

Los Pumas mantienen una rivalidad deportiva con Irlanda debido a sus duelos en los últimos tres Mundiales de rugby, el último de los cuales celebramos en este espacio. Sin embargo, mi corazoncito celta late hoy con más fuerza. ¡Irlanda Campeón!

17 de marzo de 2009

HAPPY ST. PATRICK'S!

Hoy es la fiesta nacional de Irlanda, a la que ya nos hemos referido por acá. Paula y yo, si conseguimos niñera o niñero, saldremos a festejar con unas Guinness otro 17 de marzo que nos encuentra con tres hijos.

La fiesta de hoy tiene un sentido y no está hecha para oportunistas. La sangre irlandesa se lleva o no se lleva, pero no se inventa. Y más aún, la sangre irlandesa se lleva todo el año, no solo como excusa para celebrar algo que nunca hemos honrado. Por eso ruego que se ausenten aquellos que ignoren quién fue este santo que evangelizó a la verde Erin. Para los que quieran saber más sobre su vida y tengan tiempo, aquí hay un libro de 1880 con su biografía.

Irlanda es el país de los verdes campos, los pubs de antaño (aunque cada vez queden menos), los emigrantes que aquí llegaron y la música de ensueño.

A modo de festejo, y para compartir mi verde alegría con ustedes, dejo un par de canciones representativas de la isla más cálida del mundo. Por un lado, The Chieftains en concierto, con una pareja que muestra la danza típica irlandesa. En segundo lugar, "Danny Boy", una canción típica del folklore celta, interpretada por el tenor irlandés Michael Londra y matizada por paisajes de la Isla Esmeralda. Por último, y dado que Irlanda tiene paisajes tan agraciados, dejo otro video con más imágenes de su geografía. Para más detalles, discover Ireland!

Happy Saint Paddy's Day, Mum!





16 de marzo de 2009

VELÁZQUEZ Y LA REALIDAD, INSEPARABLES

En este espacio escribí alguna vez que al momento de conocer a Paula mis dos pintores favoritos eran Goya y Velázquez. Voy a ocuparme, pues, de uno de ellos, dado que ya me he referido a Goya en más de una oportunidad.

Diego Rodríguez de Silva Velázquez Rodríguez Buenrostro y de Zayas, tal su nombre completo, representa el realismo más evolucionado en la España de los grandes reyes, donde la Inquisición estaba presente y las victorias bélicas se sucedían. Portugal era parte de España -hasta 1640- y el eje del debate artístico era si había que pintar la realidad tal como era o darle un barniz de perfección y simbolismo.

"La educación de Velázquez" -cuenta el experto Julián Gállego- "aunque beneficiándose del estudio del natural, se ha realizado en unos términos que además de subordinar el colorido al dibujo, clasifica los géneros en altos (las composiciones inventadas, religiosas, históricas, fabulosas o alegóricas) y bajos (paisajes, floreros, bodegones y, hasta cierto punto, retratos, esto es, cosas imitadas o copiadas)".

En este contexto, Velázquez se nutre del tenebrismo de Caravaggio. A los ¡19! años, en su época sevillana, pinta "Jesús en Casa de Marta y María" (la imagen puede agrandarse haciendo click sobre ella). En esta obra, observamos una mixtura entre una escena del Evangelio y otra que la precede espacialmente, que es una vieja con una joven que cocina en un bodegón. La segunda es una escena típica de una taberna como cualquiera de las que existían en esa época, y Velázquez ambienta el relato bíblico en su tiempo. El artista, evidentemente, conocía bien esos lugares. La anciana del primer cuadro parece ser la misma del segundo, detrás de María Magdalena.

Vemos unos pescados -objetos simbólicos para los cristianos- y unos huevos que parecen reales, al igual que los ajos. Los huevos vuelven a estar presentes en "Vieja friendo Huevos", una obra que también está en la National Gallery y muestra ese realismo del que hablábamos. El arte que imita a la naturaleza también es bello.

Las luces y sombras tenebristas se ven con claridad en la obra que analizamos hoy, y el contraste entre los ojos casi vacíos de la anciana y la expresión resignada de la joven es inmediato. Más aún: la segunda nos mira y parece establecer una complicidad con el observador del cuadro, típica en los cuadros de Velázquez como "Los Borrachos" o "La Rendición de Breda", un hecho histórico que fue motivo de otras obras artísticas.

Lo que más me impacta de Velázquez, nacido en 1599, es su exacta reproducción de la realidad, un estilo que más tarde sería relegado gradualmente por otros géneros tendientes a expresar los sentimientos y las imaginaciones -cuando no, alucinaciones- del autor. Tras esta sucesión de estilos yace una evolución en la mirada de la realidad, que tiene sus bases en la filosofía, desde el realismo aristotélico-tomista hasta el idealismo de Kant y Hegel, y más tarde otras corrientes que directamente desligan al hombre de la realidad exterior. El eco de estos debates en el arte es claro, y constituye un estudio apasionante.

Al traer a Velázquez a este espacio, elegí esta obra porque me evoca mi primer viaje a Europa, donde lo descubrí del todo. El cuadro habita la National Gallery de Londres, y desde allí envié una postal a mi familia que reproducía "Jesús en Casa de Marta y María". El video que dejo más abajo es, justamente, sobre una exhibición de las pinturas de Velázquez en la National Gallery, y por supuesto una de ellas es la que nos ocupa hoy. Para el presentador -Waldemar Januszczak, crítico de arte del Sunday Times-, esta obra tiene un mensaje moral sobre la necesidad de Dios. La reflexión sobre "La Venus del Espejo" me gustó mucho. Lo recomiendo, con la aclaración de que está en inglés.

11 de marzo de 2009

LA SIESTA, ESE RATO SUPREMO

La revista Selecciones del Reader's Digest solía incluir una sección llamada "La Risa, Remedio Infalible". Pues bien, a la risa yo le agregaría la siesta, ese recreo que el alma se toma en medio de sus trajines cotidianos, y del cual resurge con nuevos bríos.

Mi padre ha sido toda mi vida un referente de la siesta, que Camilo José Cela denominó "el yoga ibérico". Cuando yo era chico siempre se hacía su pausa y se venía de la editorial a casa, a almorzar primero y a "echarse" un rato, para regresar a su escritorio sobrepasado de papeles viejos o nuevos. En nuestras vacaciones en Sauce Grande, la siesta de Papá era el intervalo poco propicio para ocurrencias ruidosas; siempre esperábamos con ansias el fin de su descanso porque significaba para nosotros la vuelta a la playa y la posibilidad de comprar facturas. Mi mamá también practica la siesta ahora que ya no tiene que cuidarnos a nosotros, sus hijos adultos.

Mi cuñado Sebastián es otro aficionado a la siesta. Sus horarios laborales le han permitido darse a la práctica del reposo vespertino junto a sus hijos, envuelto en un ponchito ideal para la ocasión. Ignoro si ahora ha podido mantener esa costumbre.

En lo que a mí respecta, recuerdo algunas siestas memorables, nunca tan famosas como los cuadros alusivos de Millet y Van Gogh, pero sí muy disfrutadas. La primera que me viene a la memoria es la que gocé en Cachi, ese pueblecito salteño de plaza y capilla blanca, donde todos se conocen y el ruido es un extraño. Allí llegué un día de mochilero, y después de comerme unas humitas me tiré con mis bártulos como almohada en un banco de la plaza, para dormirme al sol, panza arriba, arrullado por los pájaros. Fue inolvidable.

Otras siestas que recuerdo tuvieron lugar con mis hijos. En Santiago de Chile, en lo de la Abuelita Cupy, estaba descansando un día en mi cama y me trajeron a Sofía, que en ese entonces tenía un mes y medio de vida. La puse junto a mí, toda acurrucada, y nos dormimos una de las mejores siestas de mi vida. Valentina, a quien pueden ver en sus tiempos de recién nacida en la foto que cierra la columna, sabe echarse unas siestas olímpicas cuando estamos todos en casa, segura de que la cuidaremos. Y reciencito nomás, dejé dormido a Pedrito en su cuna, con su año recién cumplido, que se adormiló escuchando jazz del viejo conmigo, mientras llovía sobre Buenos Aires. Como dice mi mamá y decía mi abuela Bob, Glen Miller "is smooth". Su imagen es la que encabeza y ha inspirado estas líneas.

Con Rosko también he dormido siestas memorables, donde solo se oía algún suspiro suyo, que estaría soñando con interminables corridas en el parque, seguidas de una zambullida en alguno de los lagos de Palermo.

El mismísimo día que me casé me dormí una buena siesta antes de emprender la partida a la iglesia. Fue muy provechosa, ya que la fiesta terminó a las seis de la mañana y yo seguía bailando.

Muchas personas se lo toman bien en serio, y antes de dormir la siesta bajan las persianas, se ponen el pijama y abren la cama. Yo nunca he llegado a tanto, lo mío es una siesta que podríamos llamar "casual", más espontánea y exenta de semejantes preparativos. Ahora, el ejercicio de la siesta se me ha complicado, porque los hijos no perdonan. Este descanso ha pasado a ser un hábito de lujo, que nos repartimos Paula y yo cuando queda algún hueco de calma en el hogar donde los pequeños son mayoría... y tiranía.

En ciertos países como Francia y Tailandia la siesta ha sido regulada por los organismos de control laboral, y los investigadores concluyeron que una pausa en la jornada podía incrementar la productividad de los empleados. Sin embargo, otros (aguafiestas) dicen que la siesta puede indicar problemas ocultos tras la aparente necesidad de descanso. En las provincias argentinas no les preocupa: muchas reparticiones estatales, o pequeñas empresas, hacen un corte a la tarde porque la gente se va a dormir la siesta. Para mayores pruebas, basta con llamar a alguna secretaría estatal: nadie atenderá. En Buenos Aires ese hábito ha perdido vigencia.

En España, una empresa hizo una encuesta que arrojó las siguientes conclusiones sobre la práctica de la siesta:

- 8 de cada 10 españoles prefiere el sofá, y en 8 de cada 10 casos se puede descartar un sofá si no es cómodo para sestear.
- No importa que la duración recomendada para una siesta sea de entre 15 y 20 minutos: 9 de cada 10 lo supera y 3 de cada 10 duerme más de 40 minutos, aunque los expertos lo desaconsejan.
- El 70% de los encuestados destacan la importancia de la luz y establecen que la ideal es la tenue e indirecta, una luz cálida que invite al relax o incluso la ausencia de luz.
- Gran disparidad de opiniones sobre el ruido: el 50% necesita silencio absoluto pero al 30% no le molesta y el 20% prefiere sonido ambiente sin el que no puede dormir.
- Entre los que necesitan sonido, el 40% ve los documentales vespertinos, pero también los hay que duermen con la radio, con música clásica, con películas o con eventos deportivos como el ciclismo.
- La postura es fundamental: el 78,9% prefiere dormir tumbados (el 37,5% a pierna suelta) y el resto lo hace sentado con los pies apoyados en una mesita.
- Adiós al pijama: sólo 1 de cada 10 lo usa; más de la mitad prefieren ropa cómoda como el chándal (el "jogging" de los españoles) mientras que 3 de cada 10 necesitan de una manta que los tape.
- Los perjudicados: 7 de cada 10 encuestados que no pueden permitirse la siesta por el trabajo estarían dispuestos a hacer algún sacrificio para conseguirla.
- Entre los sacrificios están comenzar antes la jornada laboral (40%), salir más tarde (30%) y comer en menos tiempo (30%).
- El 54% de los entrevistados vería con buenos ojos que en su lugar de trabajo se habilitasen zonas para sestear.

A mí, qué quieren que les diga, me parece que la siesta es un rato de gloria antes de proseguir la batalla que nos hace héroes cotidianos. Que descansen.

5 de marzo de 2009

SALE A LA VENTA UN CUADRO DE VAN GOGH

En el suplemento ADN de La Nación del sábado pasado se publicó una nota que informaba la próxima subasta del cuadro "El Parque del Hospital Saint-Paul", de mi admirado Vincent Van Gogh. La obra, pintada en 1889, es decir unos meses antes del suicidio del holandés, es un retrato del jardín del hospicio donde el artista estaba internado.

El artículo, de Loreley Gaffoglio, da algunos hechos por sentados; yo los calificaría, al menos, de dudosos. En pimer lugar, la calificación de "impresionista" que se le hace a Van Gogh es discutible, puesto que el pintor holandés fue único y dueño de un estilo muy peculiar, donde muchos ven la avanzada del expresionismo y el fauvismo. De hecho él no se identificaba como un impresionista y hablaba de él como un tercero en una de sus cartas a Theo:

"La locura es saludable por esto: que uno se vuelve quizá menos exclusivo... ¡Ah... pintar rostros como Claude Monet pinta los paisajes! Eso es lo que falta hacer a pesar de todo, y antes de que en rigor sólo se identifique a Monet con los impresionistas. Porque en fin, en rostros, Delacroix, Millet, muchos escultores han hecho cosas mucho mejores que los impresionistas y que J. Breton... Y así guardaremos siempre una cierta pasión por el impresionismo; pero yo siento que vuelvo más a las ideas que ya tenía antes de ir a París".

Al respecto también podemos leer la opinión del crítico italiano L. Vitali:

"Tras haber partido del impresionismo, y entendido la lección de Oriente, para el empleo del arabesco del dibujo y el preciosismo cromático, Van Gogh se ciñe al movimiento romántico, superándolo por la exasperada intensidad de su visión.

"No quema las naves con el naturalismo, pero vá mas allá; sus magníficas alucinaciones, que en modo alguno y en ningún instante preludian el arte abstracto, abren el camino al expresionismo. Es su primer fundador, o como dicen hoy los nuevos sabios, ¡el mayor culpable!".

Volvemos a la nota de ADN, que dice también: ""El parque del hospital Saint Paul", tal el título del óleo, es una vista intimista y privilegiada de la geografía donde el genio holandés fue conminado a recluirse tras atentar en Arlés contra la vida de su amigo Paul Gauguin".

Pero sucede que el cuadro es de septiembre de 1889, y el incidente con Gauguin tuvo lugar el 23 de diciembre de 1888. En los nueve meses que transcurrieron entre ambos hechos Van Gogh estuvo internado pero también tuvo períodos de vida en libertad, es decir que la internación en Saint Paul -en mayo de 1889- no fue consecuencia de su pelea con Gauguin, como parece sugerir la nota.

Hay más: El atentado al que se refiere la periodista no ha sido aclarado. Van Gogh había invitado a su amigo Gauguin a pasar una temporada en su "casita amarilla" de Arles, donde él quería desarrollar una comunidad de artistas. Su proyecto fracasó desde el vamos, con un Gauguin que en sus cartas a París escribía lo mal que se sentía allí. "Todo me parece tan pequeño y tan pobre, la región y las gentes. Vincent y yo no solemos coincidir, sobre todo en lo que se refiere a la pintura".

Finalmente el francés se marchó de la casa, y en una versión posterior -quince años después- dijo que Van Gogh lo había atacado y le habia parecido ver un cuchillo en sus manos, aunque omitió esa historia en otros relatos. Vincent corrió a la casa y se cortó el lóbulo de una de sus orejas, tras lo cual fue a un burdel que frecuentaba y se lo entregó a una prostituta, quien dio aviso a la policía.

Van Gogh fue internado varias veces en períodos cortos, pero con el tiempo recobró su libertad. Su internación en el manicomio de Saint-Paul-de-Mausole, en Saint-Remy, no tuvo lugar al ser "conminado" por otros, sino por propia voluntad. Su hermano Theo, a quien escribió las famosas cartas, se oponía a esto, pero Vincent se mantuvo en su idea y se internó. Allí era vigilado en lo necesario y era independiente hasta cierto punto. Él mismo, al principio de su estancia en el lugar, preferia no traspasar los muros del antiguo monasterio por temor a tener un ataque fuera de él. "Posiblemente todavía tenga que sufrir mucho", escribió.

Como detalle apuntemos que Van Gogh solo firmó siete de los 140 cuadros que pintó durante su vida en Saint-Remy, desde mayo de 1889 hasta mayo de 1890.

El cuadro que acompaña estas líneas es "Noche Estrellada", que fue pintado en septiembre de 1889 al igual que la obra que sale ahora a la venta.

2 de marzo de 2009

VUELTA A CASA


El regreso de las vacaciones es un instante del año en que el espíritu está desorientado. No tanto por el hecho de volver a la rutina -necesaria rutina, a pesar de todo- sino porque nuestros sentimientos se hamacan entre la feliz satisfacción del descanso cumplido y la decepción de saber que nada es eterno en esta vida, y en algún momento llegaremos a la autopista a La Plata, o al Acceso Oeste, o a la Panamericana. Los más afortunados arribarán a Ezeiza o Aeroparque. Quien esto escribe vive en Buenos Aires, claro está.

Siempre lo supimos, desde el día en que pusimos un pie fuera de la oficina: las vacaciones empiezan y terminan en un suspiro. Pero entonces, mientras dura ese suspiro, tenemos que paladear cada minuto de ellas como si fuera el último.

Pensémoslo así: es necesario que volvamos al trabajo, porque de lo contrario no podremos disfrutar de un nuevo descanso en los próximos meses ¿o años? Descansamos de lo que hemos trabajado, pero también de lo que hemos padecido, ya sea una preocupación crónica, una rutina demasiado exigente o, por qué no, una vida demasiado disipada (tal como le gustaría decir a nuestra amiga Maximina Traynor).

Es verdad que sería fabuloso vivir de vacaciones, visitando playas, museos y ciudades del mundo. Pero eso no es la realidad, al menos la nuestra y la de buena parte de los lectores de este humilde espacio. Entonces hay que pensar qué hay de bueno en que las vacaciones terminen. No todo lo bueno es placentero, y mucho de lo malo sí lo es, al menos en nuestro concepto de bondad y maldad.

Las vacaciones y el resto del año son ejes de la misma carreta, la que lleva nuestros sueños, proyectos e ilusiones. Hay un tiempo para todo: uno para descansar y divertirse, y otro para sembrar, en silencio y con paciencia. A veces éste último se prolonga más de la cuenta, pero ¡qué lindo es entonces gozar de unas merecidas vacaciones!

No es de mi entero agrado lo que he escrito, pero es que ya lo he dicho más arriba: mi espíritu está algo desorientado en éste, mi primer día de trabajo después del receso.

La imagen que ilustra estas líneas es de la pulpería "Adela", un local de 1870 situado a la vera de la ruta 2, en cuya puerta paramos a comer algo a nuestro regreso de La Lucila del Mar, ayer a la tarde.