29 de agosto de 2006

HOMENAJE A ELLAS

Mi hogar es habitado en estos días por tres mujeres: Paula, Sofía y Valentina. A veces me dan ganas de hablar de fútbol, y lo hago con ellas. Claro está, la adaptación a un circuito dominado por la comunicación femenina es necesaria.

Entonces le digo a Sofía (2 años): "Chochi, el domingo pasado perdimos 7 a 1". A ella no le interesa la información en sí misma, sino el estado de ánimo que ella produce en su papá. Si me ve con cara triste me responde: "¡Uy, qué lástima, Papucho!", haciendo muecas que agregan sin decirlo: "¿Por eso te vas a hacer problema, Papá?". Y trae uno de sus rompecabezas para que lo arme con ella, y me libera esa sonrisa sepultada por siete plagas bosteras.

De lunes a jueves llego exhausto de la jornada, que ha empezado a las 8 y me encuentra de regreso recién a las 11 de la noche. Entonces mi mujercita me cuenta sus penas del día, que pueden ser las 4 décimas de fiebre de Valentina, la hora y media de espera que ha tenido que pasar en el consultorio de la pediatra, el montón de trabajo en su oficina o el horario de invierno del supermercado. Y yo siento que ella no busca mi reflexión sobre estas preocupaciones, sino la compañía silenciosa que escucha y comprende. Y ella calienta la comida y la trae en bandeja con sonrisa celestial, y siento que esa sopa es una poción mágica de Panorámix servida por un ángel hecho mujer.

A la mañana siguiente me despierto y mi primera visión del día es un par de ojos verdes y enormes que me contemplan como a un juguete nuevo. Es Valentina, que recibe mi borrador de sonrisa y responde con su semblante inigualable de seis meses, y atenaza mi pulgar entre sus deditos tiernos.

Hace unos años, en algún recodo de mi soltería, semejante paliza como la que recibió el domingo mi alma cuerva habría durado en mi ánimo por lo menos una semana, y habría incluido lágrimas, malhumor en el trabajo y rechazo a toda muestra de afecto en la familia. Después del partido habría renunciado al uso de la palabra y me habría metido en un cine a ver "Frankestein", para volver a casa a las tres de la mañana sin tener que hablar con nadie.

Hoy mis mujeres no me preguntan si estoy triste. Sencillamente obran como si no lo estuviera y me obligan a ser feliz, con un zurdo azulgrana inmune a goleadas, en el centro de un rompecabezas vuelto a armar.

NO PASA NADA, PAPÁ

Es más fácil recuperarse de una goleada como la del domingo cuando en el hogar espera esto.


28 de agosto de 2006

CATÁSTROFE EN BOEDO

Ayer en la cancha viví el peor día de mi vida futbolística. A mi alrededor la gente se miraba, lanzaba algún insulto al aire, ensayaba explicaciones. Pero no las había.

El eterno hijo nos había metido 7 goles. Ese hijo incapaz de llenar la popular ni aún tapando los huecos con banderas. Ese hijo que había entrado a la cancha con miedo, algo que se vio en los primeros diez minutos en el área de ellos, donde reinaba el desconcierto y la inseguridad del arquero. Después vino la debacle, de la mano de un off-side no cobrado.

Ya se la devolveremos, porque hay revancha siempre. Ayer una maldición anduvo suelta por el Nuevo Gasómetro. No de otra forma se explica lo que sucedió. Fue un partido bastante parejo, aunque cueste creerlo. Pero en las áreas el dominio de boca fue abrumador. Recuerdo por lo menos seis situaciones de gol para San Lorenzo, contra las siete de que dispuso boca, de las que todas fueron convertidas merced a la pésima labor de la defensa azulgrana, al despliegue de Gago y a la capacidad de Palermo y Palacio, dos delanteros que en la Argentina hacen diferencia. El sexto gol es casi un cuento de Edgar Allan Poe: La pelota que estaba destinada a las nubes cobró vida y se metió por un rincón del arco, riéndose a carcajadas de los 40.000 cuervos que mirábamos con el alma colgada de un alfiler.

Boca es el campeón, cómo negarlo. Y es el mejor. Pero el de ayer fue un partido tan extraño como inesperado para ambos. A tal punto lo fue que la hinchada de San Lorenzo no atinaba a alentar, insultar o guardar silencio. Se decidió por lo primero, hasta el final, pese a lo que digan los escribas del negocio futbolístico en los medios masivos. Un amigo bostero que había ido conmigo me declaró que la tribuna de boca era "deprimente".

Por suerte uno tiene mujer e hijas que son pura sonrisa, ternura e inocencia. Uno vuelve a su casa envuelto en mufa y ellas se ocupan de reconstruir el buen humor perdido en un rincón del Bajo Flores.

Festejen, bosteros. Ya nos tocará a nosotros. Mientras tanto y pese a todo siguen siendo hijos nuestros.

25 de agosto de 2006

HOY ES FERIADO

Hoy es el Día del Peluquero y el Día del Árbol.

Un 25 de agosto también nacieron el Relator de América, José María Muñoz, y el actor Narciso Ibáñez Menta.

En esta fecha también se conmemora a San Luis, Rey de Francia, y a San José de Calasanz, quien es "Protector de las escuelas primarias y secundarias argentinas" declarado por Ley N° 24978.

El 25 de agosto de 1594 se fundó la ciudad de San Luis.

El 25 de agosto de 1944 París fue liberada por los aliados, y el 25 de agosto de 1991 Bielorrusia declaró su independencia de la Unión Soviética.

Hoy celebra su cumpleaños número 76 el actor inglés Sean Connery.

El 25 de agosto es también la fecha en la que se conmemora la independencia del Uruguay.

David Hume, Friedrich Nietzsche y Truman Capote pasaron a la historia un 25 de agosto.


Hoy cumplo 36 años.

17 de agosto de 2006

UN HÉROE REPLETO DE HUMANIDAD

Hoy se cumplen 156 años de la muerte de José de San Martín, el máximo prócer de la historia argentina. En tiempos de individualismo y frivolidad, la figura de este hombre inspira permanentemente con su ejemplo, aunque a duras penas pueden imitarse sus virtudes.

Últimamente otras figuras tienen más prensa que antes: No comparto esta manía actual de contar la historia argentina como una lucha entre buenos y malos. Los simplismos nunca explican la Historia, y justamente San Martín se exilió porque nunca quiso participar de luchas fratricidas. Su único fin era el bien de la patria, y el poder le era extraño.

Belgrano, cuya trayectoria se encuentra con la de San Martín en Yatasto, inspira la grandeza que hacía falta para inclinarse ante la figura imponente del Libertador. Inmediatamente se pone a sus órdenes, después de una frustrante campaña en el Alto Perú -hoy Bolivia- que San Martín ya consideraba una vía equivocada para liberar al continente.

Varias anécdotas nos ilustran sobre la personalidad de nuestro héroe. Sacrificó todo a su causa, consciente de que su misión en esta vida era dar la independencia a las naciones del Sur. Varias veces renunció a cargos y honores, en Argentina, Chile y Perú. Donó tierras que le habían sido dadas como recompensa por sus victorias y redujo su sueldo para volcar fondos a la causa de la independencia. "Desde este instante el lujo y las comodidades deben avergonzarnos", respondió ante la insistencia del Cabildo de Mendoza en que no renunciara a la mitad de su ingreso. Y vendió un mueble para seguir viviendo con su medio sueldo.

La biografía de San Martín se topa constantemente con otros próceres desconocidos, que hoy son solo una calle o un nombre vagamente instalado en la memoria de los argentinos. Uno de ellos es José Antonio Álvarez Condarco, que confeccionó de memoria los mapas para atravesar los Andes. Había sido enviado por el Libertador a una entrevista con el general Marcó del Pont, jefe de los ejércitos españoles, con la excusa de anunciarle la independencia de las Provincias Unidas. La intención real era explorar el paso de Los Patos y volver por el de Uspallata, que era el más corto y era por donde estaba seguro de que los españoles devolverían al espía.

Efectivamente, Marcó quiso fusilar inmediatamente a Álvarez Condarco, pero éste salvó su vida gracias a los oficios de sus compañeros masones en el ejército español. El general español lo envió de regreso con una nota en la que decía: "Firmo con mano blanca, no como la de su jefe que es negra". Esto quería decir que San Martín, según el general realista, había traicionado a España volviendo a su patria para darle la independencia.

Después de la batalla de Chacabuco, el derrotado Marcó fue llevado ante la presencia de San Martín, que irónicamente lo saludó diciéndole: "General, venga esa mano blanca".

El regreso de San Martín a Buenos Aires, después de la liberación de Chile, fue en completo silencio. Se había preparado un gran recibimiento en San José de Flores, por donde el general llegaría a la capital. Pero él adelantó su vuelta y llegó en horas de la madrugada, para no recibir ningún agasajo.

Un hito fundamental en la vida del prócer es su entrevista con Bolívar en Guayaquil. Después de ella San Martín se retira completamente de escena y le deja el campo libre al venezolano. Se sabe que él le pidió a Bolívar que le enviara refuerzos para liquidar la guerra en el Perú, pero éste se los negó. San Martín lo había ayudado a él con tropas en el norte del continente, pero Bolívar no respondió en consecuencia.

San Martín, comprendiendo que Bolívar quería tomar el papel protagónico en la etapa final de la independencia sudamericana, se ofreció a ponerse a sus órdenes si a cambio de ello obtenía los refuerzos necesarios. Pero Bolívar se mantuvo en sus trece, y el argentino se fue de la entrevista decepcionado. "Bolívar nos ha ganado de mano", comentó a sus colaboradores en el brindis después de las dos entrevistas mantenidas. Y ordenó empacar todas sus pertenencias para retirarse a Chile y más tarde a Mendoza. Eran dos personalidades opuestas. El uno, modesto, austero y cerebral, cómodo en las sombras. El otro, ampuloso, impulsivo y vanidoso, amigo de la gloria y los honores. Uno, estoico héroe griego. El otro, exaltado general romano.

La vida de San Martín ofrece ejemplos numerosos y enseñanzas para la educación de cualquier argentino. El espacio es más que insuficiente en esta columna, pero puedo recomendar algunas obras. Dos de ellas son la correspondencia del general con su antiguo ayudante de campo Tomás Guido, compilada por la historiadora Patricia Pasquali y titulada "San Martín confidencial". Esta autora también escribió una biografía del prócer: "San Martín - La fuerza de la misión y la soledad de la gloria". Otra obra recomendable es: "San Martín. El libertador cabalga", de Agustín Pérez Pardella.

Si se quiere variar un poco hay una biografía escrita por el reconocido historiador chileno Benjamín Vicuña Mackenna, quien fue el propulsor del primer monumento erigido a la memoria del prócer, y autor de su primera biografía (1862). Hay también una obra que no he leído pero desearía leer, titulada "La salud de San Martín". Fue escrita por el médico Antonio Guerrino, y estudia un aspecto bastante desconocido del Libertador, que pudo haber cambiado la historia y le da además un aire aún más heroico a lo realizado por el prócer.

En Internet hay un buen sitio donde leer documentos, cartas y anécdotas de San Martín. Es "Los documentos del cruce" , realizado merced a un concurso organizado por Clarín y auspiciado por la Unesco.

Mañana, cuando viajemos a Chile a visitar a la Abuela Cupy en Santiago, contemplaré los Andes como siempre hago desde el avión y evocaré a ese héroe de rostro humano que cruzó esa barrera inmensa de 6.000 metros a lomo de mula o en camilla, y bajo pronóstico de muerte dado por su médico, debido al esfuerzo insuperable que aquello suponía. Él y los 5.000 hombres que lo hicieron merecen nuestro recuerdo, admiración y agradecimiento.

15 de agosto de 2006

AL VINO

En el bronce de Homero resplandece tu nombre,
negro vino que alegras el corazón del hombre.

Siglos de siglos hace que vas de mano en mano
desde el ritón del griego al cuerno del germano.

En la aurora ya estabas. A las generaciones
les diste en el camino tu fuego y tus leones.

Junto a aquel otro río de noches y de días
corre el tuyo que aclaman amigos y alegrías,

vino que como un Éufrates patriarcal y profundo
vas fluyendo a lo largo de la historia del mundo.

En tu cristal que vive nuestros ojos han visto
una roja metáfora de la sangre de Cristo.

En las arrebatadas estrofas del sufí
eres la cimitarra, la rosa y el rubí.

Que otros en tu Leteo beban un triste olvido;
yo busco en ti las fiestas del fervor compartido.

Sésamo con el cual antiguas noches abro
y en la dura tiniebla, dádiva y candelabro.

Vino del mutuo amor o la roja pelea,
alguna vez te llamaré. Que así sea.


Jorge Luis Borges, 1964.

8 de agosto de 2006

VALENTINA CUMPLE 6 MESES

Escribo mientras mi hija menor llora hambrienta. Ese ser pequeñísimo que seis lunas atrás se vio de repente en manos de un extraño como su padre, ahora le sonríe, le hace ojitos y le tira los brazos. Se ha acostumbrado a pasar sus mañanas con su papá, que no es tan generoso y paciente como su mamá, pero hace un esfuerzo para que su existencia sea lo más amena posible mientras llega el ansiado mediodía de vuelta a casa.

Observar el crecimiento de un bebé es una actividad maravillosa, más aún si se trata del propio hijo. No caeré en lugares comunes: ser padre es algo indescriptible. El momento en que ese bebé inocente e indefenso abre sus brazos al mundo en su nacimiento es el momento en que el universo se vuelve bueno, dulce y tierno en el corazón paterno, e incierto y agresivo en la cabeza que todo lo quiere prever.

No existe un instante similar a aquél en que uno acompaña a su hijo para que le hagan las primeras pruebas. La madre, exhausta y feliz, ya ha cumplido con su primer cometido. El del padre empieza ese día en ese minuto milagroso.

El mundo se detiene y nada vuelve a ser igual. En el silencio imponente de la creación, el llanto inaugural de un hijo quiebra el orden dispuesto por el hombre y dibuja un Dios sobre una cunita. Desde esa inocencia desnuda, la vida grita su victoria de siempre.

He terminado esta columna. Valentina duerme serena.

4 de agosto de 2006

UNA JOYA DE PINK FLOYD




Cuando quiero llenarme de rock progresivo por unos minutos, una posibilidad es "Comfortably Numb", y especialmente la versión incluida en "Pulse", la última gira oficial de Gilmour, Wright y Mason, después de la edición del disco "The Division Bell".

Pink Floyd se reunió por última vez con motivo del Live 8 de Bob Geldof, en 2005. Allí Waters tocó con sus antiguos compañeros de ruta y expresó en público su emoción por el reencuentro en el escenario después de años de peleas y juicios por el uso del nombre de la banda.

Recientemente, David Gilmour ha dicho que para él ya está bien de Pink Floyd, aunque Nick Mason se resiste a la idea de que la banda esté oficialmente disuelta y últimamente ha hecho presentaciones con Roger Waters.

"Comfortably Numb" pertenece al disco "The Wall", pero es una de las pocas piezas de esa obra que no es de autoría de Waters, sino de Gilmour. Con ella los dejo.

1 de agosto de 2006

SOBRE EL MATRIMONIO

En días pasados alguien me habló del matrimonio como "una cárcel" que priva de la libertad a sus protagonistas. La cuestión quedó flotando en mi inquieta cabecita, no porque tuviera dudas de lo que pienso, sino por la tristeza que me da escuchar opiniones tan desesperanzadas en nombre de un individualismo supuestamente liberador y con seguridad egoísta.

El matrimonio surge de una decisión libre basada en el coraje. Hay que ser un verdadero valiente para aventurarse a formular un voto de por vida con un prójimo o prójima, en una sociedad donde la velocidad y el cambio son dioses.

Una familia requiere tiempo de proyección y madurez. Es una tarea que demanda constancia, paciencia, estabilidad emocional y sobre todo inteligencia. El amor es la base, claro está, pero la que salva la convivencia es la cabeza. El corazón es el cimiento, pero todo lo demás viene de la inteligencia en sus diversas variantes. Y esta convicción choca con el sentimentalismo vigente, que no reconoce motivos sino en el mero capricho de la voluntad posmoderna, lábil y veleidosa. Y la idea de matrimonio también va en contra del "Lo quiero todo y ahora", que impera actualmente en todos los planos del quehacer social.

"Tenés que hacer lo que sientas", te dicen. "Si ya no se aman no tiene sentido que sigan juntos", agregan, con una confusión entre lo que es el amor sereno y comprometido y una pasión necesitada de emociones fuertes. En la sociedad de hoy, lamentablemente, parece apostarse más por el fracaso que por el éxito de una relación.

Se me ha dicho: "No vas a querer a tu mujer toda la vida, es imposible". Pese a que hay vastos ejemplos que contradicen esta opinión, lo que me entristece es esta visión tan pesimista y resignada al statu quo, a la imposibilidad de proponerse el largo camino a la felicidad propia y de la persona que amamos. ¿Habrá algo más sublime que hacer a alguien feliz gracias a nosotros, en este mundo inhóspito cargado de dudas y amarguras? El solo hecho de intentarlo ya enaltece a la persona.

Cunde la concepción del amor como algo pasajero, ajeno a nosotros y dependiente de humores cortos de miras. De ahí a la profecía autocumplida hay apenas unos pasos, los que dictan la resignación y el derrotismo de la sociedad fundada en un individualismo mezquino y sin valores objetivos.

¿Que hay ejemplos de matrimonios fracasados? Por supuesto, pero esto no hace la regla. También hay estudiantes, deportistas, músicos o investigadores que no han llegado a nada, y sin embargo el estudio, el deporte, la música y la investigación siguen siendo grandes motores de la humanidad.

Siempre vale la pena luchar por el éxito de una aventura que alguna vez se empezó. El matrimonio es la verdadera aventura, y en el hogar se llevan a cabo las verdaderas gestas cotidianas. Pensar que el matrimonio no se adapta a la sociedad de hoy en día es como pensar que los pies de hoy no se adaptan a los zapatos de moda, y decidir entonces amputar los pies. El tema está planteado al revés, y en lugar de cuestionar la institución, el cuestionamiento debe hacerse sobre los principios que gobiernan la sociedad. En pocas palabras, sobre el individualismo y el relativismo que cuelgan todo de alfileres y construyen relaciones descartables, listas para ser reemplazadas en cuanto no se adapten al egoísmo posmoderno.

Nada hay más trascendental en la vida de una persona que entregarse a otra. Nada dota de más sentido a la propia biografía que la construcción lenta y paciente de un hogar al que llegarán nuevas risas pequeñas e inocentes. Si alguien quiere vivir una aventura de verdad, que se case con la mujer que ama. La fidelidad es toda una aventura.

No existen una familia "tradicional" y una "moderna". Existe una familia compuesta por hombre, mujer e hijos si tienen la suerte de tenerlos, y lo demás es verso. Y si no, que les pregunten a los pequeños, que lo esperan todo de padre y madre.

"Muchos hombres han tenido la suerte de casarse con la mujer que aman. Pero tiene mucha más suerte el hombre que ama a la mujer con la que se ha casado". (Gilbert Keith Chesterton)

Ya hablaremos de la soltería. Gracias por su lectura.