22 de julio de 2009

ARGENTINA EN 1932

En un blog que visito a menudo encontré un video turístico sobre la Argentina hecho en 1932. Está en inglés, si el amigo lector lo entiende mejor, y si no las imágenes de Buenos Aires en esa época son imperdibles.

No sé si será porque está en blanco y negro, pero me parece que todo era más limpio, más digno de un país que era "uno de los más ricos del mundo", tal como dice el locutor al inicio del documental: la Costanera Sur (la foto corresponde a una postal de 1933, año en que San Lorenzo salió campeón por primera vez en el profesionalismo recién estrenado), la Plaza de Mayo, el Tigre o el Monumento de los Españoles.

Es muy gracioso oir hablar del barro del Río de la Plata u observar a un cliente comprando leche directamente ordeñada de la vaca en una calle porteña. Otro país.

20 de julio de 2009

BORROMEO

Hace unos seis años, en una Primera Comunión me lo encontré a Juan Carlos Calabró. Me acerqué y le dije: "¡Borromeo, vení que te reviento!", y nos reímos los dos. Lo felicité, le dije que había llenado mi infancia de risas y lo dejé feliz con su nutrida familia.

Dedicado a mis sobrinos Tomás, Ignacio, María Luján y Javier, va este video de Borromeo, el inolvidable personaje que encarnaba Jaimito Cohen en "Calabromas". Otra época, otro humor.

9 de julio de 2009

SAN MARTÍN Y LA INDEPENDENCIA

Cuando el visitante entra a la sala donde los congresales declararon la independencia argentina, en la Casa de Tucumán, toma conciencia de la locura que cometieron. En ese cuarto no muy grande se reunieron 35 hombres -de los cuales 12 eran sacerdotes, 18 abogados, uno regidor del Cabildo de Córdoba, otro bachiller en Filosofía, otro doctor en Teología, otro militar (el único, Pueyrredón) y el presidente, Laprida, bachiller en leyes- de las distintas provincias o regiones del antiguo Virreinato del Río de la Plata para decidir qué hacer con la nación que había nacido el 25 de mayo de 1810, o para algunos, ya en las Invasiones Inglesas.

Mientras en esa casa de Tucumán se declaraba la independencia de "las Provincias Unidas de Sud América" y se firmaba un acta escrita en español y en quechua, la situación de la causa independentista en el resto de Iberoamérica era desesperante. En México el realismo había logrado un avance decisivo sobre los rebeldes y combatía a los últimos reductos. En Venezuela, en 1814 el realista Bobes -según muchos un hombre sanguinario- ya había vencido completamente a los revolucionarios -a costa de su propia vida- y llegaban refuerzos españoles liderados por Morillo. La libertad en América del Sur se parecía cada vez más a una utopía, y ni hablar de una posible independencia del Perú, empresa que San Martín ya preparaba a través de los Andes y por mar.

El mismo San Martín era partidario de una monarquía constitucional más que de una república, que según él conduciría a una división en localismos. Belgrano, presente en la Casa de Tucumán el 9 de julio de 1816 pero no participante de la votación, propuso una monarquía basada en la dinastía incaica como factor de unión y reaseguro de independencia. Los congresistas, en su gran mayoría, compartían la visión de Belgrano. A este respecto, es muy interesante el tratamiento de la cuestión en el libro de Agustín Mackinlay que hemos comentado recientemente: "El enigma de Mariano Moreno".

De todas maneras, es probable que San Martín tuviera a la república como mejor forma de gobierno, pero en su condición de hombre netamente práctico, no creía que las Provincias Unidas estuvieran aun maduras para un sistema semejante, y por eso pensara en la monarquía. En una carta de 1842, años después de la gesta libertadora, escribió: "Yo no soy de los que creen que es necesario dar azotes para gobernar; pero sí el que las constituciones que se den a los pueblos estén en armonía con su grado de instrucción, educación, habitudes, género de vida, etc."

San Martín, que recién en agosto recibió la noticia de la declaración de la independencia, fue uno de sus principales propulsores desde su lugar en los preparativos de la campaña militar más grande que se hubiera podido imaginar. En carta a su representante en el Congreso de Tucumán, Godoy Cruz, decía a principios de 1816: "¡Hasta cuándo esperamos declarar nuestra independencia! No le parece a usted una cosa bien ridícula, acuñar moneda, tener pabellón y cucarda nacional y por último hacer la guerra al soberano de quien en el día se cree dependemos, qué nos falta más que decirlo por otra parte ¿qué relaciones podremos emprender cuando estamos a pupilo? Los enemigos (y con mucha razón) nos tratan de insurgentes, pues nos declaramos vasallos. Esté usted seguro que nadie nos auxiliará en tal situación y por otra el sistema ganaría un cincuenta por ciento con tal paso".

Feliz Día de Independencia, pues, y recordemos a esos hombres que se la jugaron por un país "libre e independiente", según reza el Acta de la Independencia, el original de la cual, lamentablemente, se perdió en un extraño episodio.

8 de julio de 2009

HOMBRES EN EL CINE

Había publicado los videos que un cinéfilo había armado con rostros de actrices, y de mujeres en obras de arte. Ahora es el turno de los hombres. Que los disfruten, especialmente las lectoras femeninas, y a ver a cuántos reconocen los cultores del cine. Lo encontré a través de El Opinador Compulsivo.



La lista: Douglas Fairbanks Sr., Rudolph Valentino, Charlie Chaplin, James Cagney, Spencer Tracy, Fredric March, Errol Flynn, Fred Astaire, Clark Gable, Laurence Olivier, Gary Cooper, Humphrey Bogart, James Stewart, Tyrone Power, Cary Grant, Henry Fonda, Robert Mitchum, John Wayne, Kirk Douglas, Gene Kelly, Burt Lancaster, William Holden, Marlon Brando, James Dean, Rock Hudson, Montgomery Clift, Anthony Quinn, Gregory Peck, Richard Burton, Jack Lemmon, Sean Connery, Sidney Poitier, Charlton Heston, Steve McQueen, Peter O'Toole, Paul Newman, Clint Eastwood, Robert Redford, Dustin Hoffman, Roy Scheider, Warren Beatty, Dennis Hopper, Al Pacino, Jack Nicholson, Robert De Niro, Gene Hackman, Jon Voight, Harrison Ford, Kevin Kline, Kevin Costner, Michael Douglas, Christopher Walken, Mel Gibson, Sean Penn, John Travolta, Antonio Banderas, Tim Robbins, Samuel L. Jackson, Tom Hanks, Denzel Washington, Tom Cruise, Brad Pitt, Russell Crowe, Kevin Spacey, Will Smith, Jamie Foxx, Leonardo DiCaprio, Johnny Depp, Matt Damon, George Clooney.

6 de julio de 2009

¿ALGO MÁS, ROGER?

Ganó Wimbledon por sexta vez, retomó el número uno y obtuvo otro Grand Slam, con el que superó a Pete Sampras. ¿Algo más? Humilla a sus rivales, los hace terminar como Roddick ayer, preguntándose qué hay que hacer para ganarle. Y todo con esa clase que se ve hasta en el andar. Solo Nadal ha encontrado la manera de derrotarlo y generarle un estado mental negativo, pero está pagando un costo físico que Federer no ha tenido que pagar en su ya extensa carrera.

He visto en distintos blogs, últimamente, una suerte de resentimiento de algunos comentaristas con Roger Federer, una negación de su grandeza y, evidentemente, una envidia muy típica de muchos argentinos a los que no les gusta ver triunfar a otro. Hoy mismo respondí un comentario de alguien que caracterizaba a Federer como "el tenista del establishment". ¡Increíble! ¿Será porque usa Nike, igual que Nadal? ¿O porque es un caballero, como Roddick? Curioso mecanismo psicológico que consiste en negar y embarrar lo que no convalida fracasos propios.

En fin, Roger Federer no es comparable con Laver o Borg, según dicen por ahí, porque son épocas distintas, zapatillas y raquetas distintas, y rivales diferentes. Pero a mí me parece que es el mejor, con el beneficio de la duda por los otros tres monstruos de la foto. Lo que es seguro es que ya está en el Olimpo del tenis, y solo cabe agradecerle por tanto arte en tan poco tiempo. Salud, Roger.