Existen dos días en el año que atraen las cursilerías de la gente linda. Uno es el Día del Amigo, al cual ya me he referido. El otro es hoy.
Al igual que en el Día del Amigo, he recibido una invitación para festejar juntos el Día de la Primavera, de parte de alguien que no conozco. Graciosa coincidencia, que refuerza mi teoría.
En beneficio de la fecha que hoy nos ocupa, podemos decir que no es una creación comercial o interesada, sino algo puramente espontáneo que se da año tras año, y de lo cual la naturaleza es la primera informante. Paradójicamente, la primavera no empieza hoy sino con el equinoccio que será el sábado 23 a la una de la noche.
Es muy loable la costumbre de regalar flores a las mujeres cada 21 de septiembre, aunque ignoro por qué no se les regala algo también a los hombres. No pido gran cosa: apenas un par de ballenitas, un viaje en colectivo o un ejemplar del Olé (aunque la verdad es que este periódico me parece bastante malo).
Esta mañana puse en casa la Primavera de Vivaldi, y encabezo ahora esta columna con la pintura de Giuseppe Arcimboldo, italiano renacentista que nos dejó esta original obra ("Primavera", de 1573) junto con otras tres dedicadas a cada una de las estaciones del año. Hay, por supuesto, poesías y canciones dedicadas a la primavera.
Hoy también es el Día del Estudiante. Vaya, pues, desde este espacio, un saludo a todos los estudiantes que honran este blog con su presencia, y esta canción legendaria como obsequio.
Yo creo que nunca dejamos de estudiar en la vida, aún en el ocio más puro, que es la gozosa actividad de la no actividad. Tan solo con detenernos a contemplar a las personas que nos rodean en el colectivo, seguimos estudiando. Ni hablar de las lecciones que nos imparte la implacable vida. En una época solía decirle a mi amigo la Oveja que quien más sabía era quien más se había equivocado. Con el tiempo llegué a la conclusión de que la frase sonaba linda pero solo servía para justificar los propios errores, y entonces la dejé de lado.
Lamentablemente hoy en día hay una visión bastante utilitarista del estudio entre alumnos, padres y maestros. Entonces todo lo estudiado tiene que servir para algo material. La pregunta, que debería ser qué se está estudiando, es en cambio para qué sirve lo que se está estudiando. Como suele suceder, en el equilibrio está la elección correcta. Entre lo que a uno le gusta y lo que a uno y a su posible familia le dará de comer.
El estudio no es solo una base de lanzamiento para una vida de trabajo y autoabastecimiento, sino también el refugio más sólido para el propio desarrollo mental y espiritual, que en principio no trae dinero como primer efecto, sino una personalidad fuerte y madura para hacer frente a los grandes desafíos del camino.
Borda Vive
B
V
21 de septiembre de 2006
LA PRIMAVERA VIENE LLEGANDO
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
la verdad muy inspirada no me encontras en este dia... dado que tengo examen el lunes.. osea yaaaa... pero bueno... lo unico que puedo decir con respecto al dia del estudiante es que me siento muy bien de que sea mi dia.. es justo que lo celebremos aunque sea estudiando.. y que no corre para los que se machetean... jajaj
Saludos...
ya actualizare mi blog, cosa que no pude hacer por falta de tiempo...
Anxie...
Publicar un comentario